miércoles, 23 de marzo de 2011

Las 5 razones por las que The Big Bang Theory dejó de ser divertida para mí.

Bueno, desde que empezó la tercera temporada de The Big Bang Theory he perdido de manera progresiva mi interés por ver la serie al punto en el que sólo he visto un par de capítulos de la 4ta temporada. Lo cierto es que pasó de ser un programa original y que nos daba magníficos vistazos del amplio y polifacético mundo de los geeks a convertirse en una Sitcom genérica que da tumbos por todos lados tropezándose con las trampas que se tiende a sí misma en el desarrollo de su trama.

A continuación listaré las razones por las que creo que la serie ha dejado de ser divertida:

1. La relación Penny-Leonard.

Para muchos la tensión romántica prolongada es una fórmula ganadora al escribir el argumento de una serie de televisión; de manera que cuando la relación de Penny y Leonard dejó de ser algo sólo platónico, el interés que producía la serie en sus seguidores se vino abajo. Sin embargo, desde mi punto de vista, la relación de Penny y Leonard no fue lo que afectó a la serie sino la manera en que fue manejada. Claramente los escritores no tenían idea de qué hacer con cada personaje una vez que la historia dio un paso tan importante y fue lo que desencadenó muchos de los problemas que listaré a continuación. En cuanto a la pareja: Penny se vio poco afectada por el cambio. Leonard, por otro lado, se convirtió en una especie de niño caprichoso por el cual no se puede sentir mucha empatía. Comenzó a denigrar a aquellos quienes habían sido sus amigos y asumió falsamente el papel de una persona bien adaptada. Toda la gracia que tenía se perdió entonces para convertirse en una persona quejumbrosa, arrogante y que no aportaba mucho a la serie, siendo Penny el único personaje de la pareja que parecía afectar la historia.

2. La disolución del grupo de amigos.

Cuando Penny y Leonard entraron en su relación. Uno de los cambios más notorios fue la separación del grupo de amigos. Leonard se apartó de ellos para estar con Penny y al ser el único elemento cohesivo entre ellos, durante los siguiente episodios los tres (Raj, Howard y Sheldon) deambulan de un lado a otro sin que ninguno de ellos adquiera un lugar concreto. Uno de los ejemplos más notorios de esta transición fue cuando la posible deportación de Raj lo llevó a trabajar con Sheldon. La secuencia en la que ellos miran al pizarrón por horas mientras se escuchan los acordes de "Eye of the Tiger" son un intento estulto y francamente desesperado de hacer que el dúo cobrara algo de simpatía ante los televidentes. Al mismo tiempo, Howard se convirtió en el mal tercio de la pareja de Penny y Leonard, cosa que resolvieron consiguiéndole una novia. Un personaje que no sólo aporta poco a la serie, sino que aún no logra funcionar con los demás.


3. La permanencia forzada de Sheldon.

Si algo nos queda claro en la serie es que Sheldon no es una persona agradable o fácil de tratar. Y en un principio era claro que Leonard era de los pocos que habían desarrollado un grado significativo de tolerancia hacia él y sus idiosincrasias. Repentinamente al salir con Penny y no necesitar a sus amigos geeks. Desaparece la razón por la cual el departamento de Sheldon y Leonard sea un punto de reunión. Claramente Howard y Raj no lo toleran y Sheldon puede prescindir de su compañía. En realidad, Sheldon no tiene ningún vínculo con los demás y a ninguno de ellos les agrada. No obstante, es el personaje más popular de la serie y esto hace que no puedan deshacerse de él, que es lo que sería el curso natural de la serie. Solamente es tratado con hostilidad por los demás y él no se inmuta. La respuesta de los escritores a esta dinámica absurda fue el capítulo donde hacen una retrospectiva de los primeros años de Leonard viviendo con él. Un capítulo que aunque entrentenido, sólo es un absurdo intento para hacer que él siga viviendo con Sheldon para que siga en la serie.


4. Rajesh Koothrapali

Su incapacidad para hablar con las muheres lo convierten en un personaje bastante complicado. Al principio estaba bien colocado dentro del grupo, pero al perderse esto, su personaje fue uno de los que más sufrió el paso de la serie. Oscilando entre el abuso del chiste que se hizo sobre una relación homosexual oculta que tenía con Howard como resultado de su falta de intimidad y ser el objeto de burlas de los demás por su incapacidad de estar con las mujeres; el personaje parece estar de más en la serie. Si sigue así su única salida lógica será salir del clóset, mudarse a otro barrio a iniciar su nueva vida con un círculo social completamente distinto.

5. La disminución del humor geek.

Por último, pero no menos importante. La serie pasó de pintar una imagen bastante acertada del mundo de los geeks a convertirse en un señalador más de estereotipos. En lugar de ofrecer una vista "desde adentro" regresa a aquella óptica más acusadora y denigrante. Ya no muestran al lado gracioso de un geek sino que se burlan "respetuosamente" de él. La serie se ha vuelto superficial y trivializa el tema que en el fondo, era lo que la hacía una sitcom única.

sábado, 12 de marzo de 2011

Sobre la planta nuclear de Fukushima.

Pocas cosas me irritan más que escuchar el estulto aullido de los seudoambientalistas, quienes condenan con severidad la energía nuclear al observar el incidente que ha tenido lugar en la planta de energía de Fukishima.

Lo cierto es que su clamor, no parte de una opinión bien fundamentada; basada en hechos, evidencia y sentido común. Sino que es el eco de lo que algunos fatalistas dejaron ver del desastre nuclear de Chernobyl, en Ucrania. Evento que hasta ahora ni en la naturaleza ni en su manejo se asemeja a lo que está ocurriendo en el presente en Fukushima.

Para entender lo que está pasando, tenemos que entender primero qué es una planta nuclear y cómo funcionan. En este caso en concreto, las plantas nucleares de agua en ebullición. (como la de Fukushima y la de Chernobyl) Con este fin, es necesario explicar primero qué es una reacción de fisión nuclear.

En términos simples, los átomos están compuestos de protones, neutrones y electrones. Los protones y neutrones se agrupan en el centro del átomo formando lo que se conoce como núcleo, mientras que los electrones orbitan a su alrededor. Cuando un neutrón es disparado al núcleo de un átomo muy grande (Uranio, por ejemplo), éste se rompe en dos núcleos de átomos más pequeños. Como resultado de esta reacción se produce una gran cantidad de calor, además de que se liberan dos neutrones adicionales. Si estos neutrones se encuentran en un ambiente donde hay muchos núcleos de Uranio, estos repetirán el proceso, donde se liberarán más neutrones que a su vez chocarán con otros núcleos. A este proceso se le conoce como reacción en cadena y como resultado se produce una gran cantidad de calor. Asimismo, el combustible empleado en esta reacción se reduce a átomos más livianos y que por lo general son radiactivos.

Una reactor de agua en ebullición consiste de un núcleo donde se lleva acabo la reacción nuclear. El cual consiste de combustible en forma de barras, así como un moderador que reduce la velocidad de los neutrones para que sea óptima para que se lleve a cabo una fisión nuclear. También se usan barras de control, hechas de materiales como boro o cobalto, que pueden absorber neutrones libres sin fisionarse y ayudan a inhibir la reacción en cadena.

En el núcleo, una vez que se inicia la reacción en cadena, comienza a producirse una gran cantidad de calor. En los reactores de agua en ebullición, se hace circular refrigerante, lo que evita que el núcleo del reactor se sobrecaliente. Después, se usa agua a manera de refrigerante secundario, con la cual se produce vapor que hace girar una serie de turbinas que generan la energía eléctrica.

Siempre y cuando la temperatura del núcleo del reactor sea menor que el punto de fusión (temperatura a la cual un sólido se funde) del material que lo compone. El reactor funcionará de manera correcta. Para evitar que ocurra una fusión del núcleo, se usan las barras de control para inhibir la reacción en cadena y reducir la cantidad de calor producido, o bien, se aumenta la cantidad de refrigerante. Sin embargo, esto disminuye la cantidad de energía generada, por lo cual los técnicos de la planta nuclear se encargan de mantener el reactor a una temperatura segura sin comprometer el abasto de energía eléctrica.

Cuando una fusión del núcleo tiene lugar, la estructura que mantiene aisladas a las barras de combustible se compromete. Empiezan a haber fugas de refrigerante, el agua se contamina rápidamente y se libera a la atmósfera en forma de vapor de agua, llevando consigo grandes cantidades de los elementos radiactivos.

Es por esta razón, que muchos reactores nucleares son construidos con varias capas de seguridad en edificios de contención que ayudan a minimizar los efectos de una fusión del núcleo. Estas construcciones están hechas para preservar la seguridad de las personas que trabajan ahí y de quienes habitan las inmediaciones.

Los incidentes de Chernobyl y Fukushima poco tienen que ver los unos con los otros. En principio, Chernobyl fue un desastre que ocurrió al ser anuladas las medidas de seguridad que impiden que la planta sea operada en condiciones inseguras. Esto, con el fin de llevar a cabo un experimento no autorizado que llevó a uno de los reactores a una condición de alta inestabilidad. Esto llevó a un aumento descontrolado de la temperatura que terminó incendiando el grafito que era usado como moderador y ocasionó una serie de explosiones térmicas que dañaron severamente el núcleo y lanzaron una gran cantidad de vapor de agua contaminado a la atmósfera. La evacuación de las personas que se encontraban cerca comenzó hasta 13 horas después del incidente. Aunque en principio se intentó hacer descender las barras de control, el daño impidió que estas descendieran por completo, lo que impidió que el reactor pudiese ser apagado.

En Fukushima, los daños ocasionados por el sismo de Sendai hicieron que el sistema de seguridad automáticamente apagara los reactores. (Cosa que en Chernobyl no pasó), posteriormente, el sistema de refrigeración de emergencia comenzó a disipar el calor residual de la reacción (aunque el reactor fue apagado instantáneamente introduciendo las barras de control completamente, la reacción toma tiempo en detenerse y continua produciendo calor por varios días). Sin embargo, una falla eléctrica en la planta de diesel de la central causada por el tsunami hizo que el sistema de refrigeración dejara de funcionar. La evacuación se comenzó inmediatamente en diferentes radios, mientras se trataba de valorar la situación.

Al dejar de funcionar, comenzó a acumularse vapor de agua en las contenciones interiores y daños en las barras de combustible contaminaron la mezcla con cesio y yodo (residuos de la fisión). El exceso de presión en el reactor aumentaría la temperatura y para evitar una fusión del núcleo, ventilaron los gases al edifico exterior de contención. Ahí se formó una mezcla extremadamente volátil de hidrógeno (producido por la reacción entre las barras de combustible dañadas) y oxígeno, la cual ocasionó la explosión que fue observada más tarde. Dicha explosión dañó el edifico exterior de contención y liberó cesio y yodo al ambiente, además de radiación. Sin embargo, se estima que fue insuficiente para dañar las estructuras internas del reactor. Esto último se ve respaldado porque no se han observado un aumento en la cantidad de cesio y yodo o en los niveles de radiación en las horas subsecuentes. Más tarde, la operadora de la planta nuclear decidió inundar el conjunto con agua de mar mezclada con ácido bórico (un agente que disminuye la cantidad de neutrones libres, inhibiendo la reacción nuclear) que ayudaría a disminuir la temperatura del reactor a niveles donde no representaran un peligro. Esta acción hará que el reactor quede inutilizable, aunque es una manera efectiva de evitar una fusión del núcleo. La razón por la que se decidió que salvar el reactor no era prioritario se debe a que este era viejo y se encontraba en proceso de ser remplazado debido a que se acercaba el fin de su vida útil. De modo que era más conveniente sacrificarlo para salvaguardar la seguridad del ambiente y las personas que habitan en las inmediaciones.

A final de cuentas, no hay punto de comparación entre lo que pasó en Chernobyl y lo que estamos viendo actualmente en Fukushima. En Chernobyl ocurrió uno de los peores eventos concebibles y las medidas tomadas después para mitigar los efectos fueron inoportunas e inadecuadas. El daño no fue evaluado sino hasta mucho después y fueron necesarios varios días para que el lugar estuviera siquiera en condiciones de ser examinado. En Fukushima el incidente no fue tan grave, además de que se adoptaron medidas de manera inmediata para mitigar los daños y la condición del reactor está siendo valorada por varios especialistas en medida en que esto se hace posible teniendo siempre en cuenta la seguridad de los trabajadores. Sólo algunas decenas de personas han sufrido exposición significativa a la radiación y se están tomando medidas al respecto. La planta nuclear suspendió su actividad por completo inmediatamente después del sismo. A diferencia de Chernobyl, que tenía reactores funcionando tiempo después de la primer explosión.

La energía nuclear no es la única que representa un peligro para las personas. Ya han ocurrido desbordamientos de presas o explosiones en centrales termoelécticas que han resultado en una gran cantidad de víctimas. Chernobyl fue un desastre terrible, pero también una lección importante que fue aprendida. Las medidas de seguridad en las plantas nucleares se han vuelto más estrictas y nuevas tecnologías han surgido para evitar los problemas de un incidente. La energía nuclear va acompañada de peligros y su potencial dañino es grande. No obstante, es la ignorancia lo que produce miedos tan grandes e irracionales hacia una forma de energía que hasta el momento ha probado ser bastante segura y limpia. Los peligros que la acompañan se ven opacados por sus ventajas y por eso es una alternativa viable que se ha adoptado cada vez más. El incidente de Fukushima es un recordatorio de los peligros que existen en la energía nuclear y en la importancia que tiene la seguridad en torno a ella. Pero de ningún modo representa una alerta que nos diga que debemos dejarla. Del mismo modo que los desbordamientos o explosiones no nos han disuadido de otras formas de energía. Simplemente es cuestión de apelar al sentido común y comprender que no por el hecho de que la energía nuclear no sea simple de comprender, no por ello es inherentemente peligrosa o poco viable.